En 1961, Rui Nabeiro creó Delta Cafés, marca de éxito en la península ibérica y en el mundo, ejemplo de vanguardia, innovación, voluntad empresarial y, sobre todo, símbolo de una villa, Campo Maior., Portugal.
A partir de la 2.ª mitad de los años 70, la estructura comercial de Delta Cafés se consolidó definitivamente, lo que en 1984 dio lugar a la separación de la actividad comercial de la empresa Manuel Rui Azinhais Nabeiro, de la actividad industrial desarrollada por Novadelta S.A. La emergencia de nuevas tipologías de negocio, la necesidad de desarrollo de nuevos productos y la creciente exigencia de ofrecer un servicio global, que afectaba a áreas complementarias al café, supusieron rediseñar el negocio que culminó en 1998 con la reingeniería del Grupo Nabeiro/Delta Cafés.
La necesidad de diversificación llevó a la constitución de 25 empresas de los sectores más variados: industria, servicios, comercio, agricultura, inmobiliaria, hostelería y distribución, organizadas por áreas estratégicas. Desde su fundación, Delta se asentó sobre valores sólidos y principios que se reflejaron en la creación de una marca de rostro humano, que se reafirma en la autenticidad de las relaciones con todas las partes interesadas.
En resumen, creemos en las personas, y por las personas, damos lo mejor de nosotros cada día en todos los campos de actuación de nuestra actividad.
Misión y valores
Compartimos los principios explícitos del Pacto Global de las Naciones Unidas y guiamos el desarrollo de nuestra actividad mediante prácticas transparentes, íntegras y solidarias con todas las partes interesadas, a la vez que esperamos la misma actitud de nuestros socios.
Nosotros no somos partidarios de los beneficios inmediatos que puedan comprometer el desarrollo sostenible de la empresa. Reconocemos la necesidad de asegurar un retorno financiero sostenible, a largo plazo, a través de un proceso de innovación e inversión responsables, de modo que se mantenga el liderazgo en el mercado nacional y se vaya progresando en el proceso de internacionalización de la marca.
El rendimiento de Delta se orienta hacia la participación en diversas causas de cariz social, con miras a suprimir las necesidades de las partes interesadas y contribuir al desarrollo sostenible.
Tenemos como prioridad la implantación de una cultura de la innovación y el conocimiento compartido, basada en los principios del ecodiseño y la eficiencia energética, que potencie la competitividad y garantice el liderazgo de mercado. Nuestro modelo de gestión valora la capacidad emprendedora y el espíritu de mejora continua.
La humildad es inherente a la forma de estar y se refleja en la informalidad del ambiente de trabajo y de las relaciones entre empleados en el día a día.
Defendemos la divulgación de información veraz, que se corresponda con la realidad de los hechos.